Aún sin abrir los ojos la luz le derrite las retinas. No puede evitar soltar un grito largo, seguido del llanto. Extraña sentir aquel familiar líquido sobre su piel sensible y lozana. Oye voces. Voces que no reconoce. Con el corazón desbocado cae en la cuenta de que está en un lugar desconocido y frío, hasta que recibe el primer abrazo de aquella voz que lo acompañó durante los nueve meses que estuvo en la oscuridad: “Bienvenido hijo”.
A este lado
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Muy hermoso !!!
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Muchas gracias Sookeeper 🙂 Feliz fin de semana
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Desde que inicié la lectura me preguntaba: “Qué era? De qué se trataba?” Y no me imaginé que hablaba de las sensaciones de un bebé al salir del vientre de su madre. Ta’bueno 🙂
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Gracias P. Gabriela 😊 esa era la idea jaja!! Saludos
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